Después de tantos tropezones y caídas logré entender algo. Que la vida es una sola, y poder vivirla es un milagro. Entendí que de las desilusiones siempre aprendemos,pues nos usan y nos hieren,y de esta manera nos fortalecemos. Debemos continuar a pesar de los golpes que nos demos, problemas tenemos miles,sólo es cuestión de proponerse a resolverlos.Sé que no es nada fácil,pero imposible tampoco, sé que la vida a veces es injusta, y que eso duele un poco. En algunos casos estamos ciegos pero la vida nos da pistas ,depende de nosotros verlas, poder abrirnos, y ser realistas. Finalmente, concluyo con que nunca se puede evitar sufrir,pero quien puede negar ¡lo lindo qué es vivir!